Por: Jorge Maldonado Díaz

Luego de seis años de haber estado archivada, este miércoles el Congreso Local rechazo las peticiones hechas por restauranteros, bares y casinos de permitir fumar al interior de espacios cerrados.

Lo anterior al aceptar el veto hecho por el entonces Gobernador del Estado, Jaime Rodríguez Calderón a la Ley para la Protección contra la Exposición al Humo del Tabaco.

La Comisión de Legislación presento el dictamen ante el pleno en el que emitía las observaciones hechas ala decreto 68 de la Legislatura 74.

En la exposición de motivos, el ex mandatario señalaba que de permitir que las personas fumaran en espacios cerrados iban en contra de los derechos de la salud.

Incluso el exmandatario fue más haya, al señalar que definitivamente contravenía a las disposiciones constitucionales, pero sobre todo carecía de sustento legal, por ese motivo no pudo avalar la ley y publicarla en el Periódico Oficial.

Al escuchar los argumentos, los diputados al momento de votar la propuesta de la comisión aprobaron la propuesta por unanimidad.

Por tal motivo, el decreto numero 68 quedo sin efecto y por tal motivo la ley se mantendrá igual y se tendrán que respetar los espacios libres de humo, como actualmente se han venido llevando a cabo en espacios cerrados.

Consideramos aceptar las observaciones, ya que, de manera contraria a la reforma en cuestión, la legislación vigente es concordante con la legislación nacional”.

“Son de aceptarse las observaciones realizadas por el promovente al referido Decreto, lo que da pie a dejarlo sin efectos en su integridad”.

“Se deja sin efectos el Decreto 68 de fecha 19 de diciembre de 2015, emitido por la 74 Legislatura”, se leyó en el dictamen.

Cabe destacar que este expediente de reforma había generado el año pasado polémica en el estado de Nuevo León.

Porque los restauranteros y propietarios de bares y casinos habían presionado para que se avalara en la ley el permiso para que sus clientes pudieran fumar en espacios cerrados.

Incluso el año pasado se circuló un anteproyecto en donde los legisladores rechazaban el veto del ex mandatario.

Con esto le daban entrada a la nueva ley y se acatarían las disposiciones de los que pedían fumar al interior de los establecimientos.

Sin embargo, la sesión en que se iba a votar ese dictamen finalmente no se llevó a cabo y se canceló de ultima instancia.