Este lunes, el Vaticano reafirmó su posición respecto a temas como los cambios de sexo, la teoría de género y la maternidad subrogada, así como su condena al aborto, la eutanasia y la pena de muerte.

Esta declaración surge después de meses de debates y controversias en torno a la bendición de parejas del mismo sexo, reflejando la postura doctrinal de la Iglesia Católica en estos asuntos.

En el documento titulado «Dignitas infinita» (Dignidad infinita), la oficina doctrinal del Vaticano aborda una serie de temas que la Iglesia considera amenazas a la dignidad humana.

El texto, aprobado por el Papa Francisco, enfatiza la oposición a la maternidad subrogada, la teoría de género y los cambios de sexo, mientras reitera la condena a prácticas como el aborto y la eutanasia.

La declaración sostiene que la maternidad subrogada viola la dignidad tanto de la madre subrogada como del niño, mientras que la teoría de género es descrita como una tentación para desafiar la verdad fundamental de la vida humana como un don divino. Respecto a los cambios de sexo, el documento advierte sobre los riesgos que conllevan para la dignidad humana.

Además de abordar estas cuestiones, la declaración también menciona el abuso sexual como una amenaza a la dignidad humana, reconociendo su presencia incluso dentro de la Iglesia Católica. También denuncia la violencia contra las mujeres, el acoso cibernético y otras formas de abuso en línea.

El texto refleja la preocupación del Vaticano por mantener una postura coherente en asuntos éticos y morales, reafirmando principios arraigados en la doctrina católica.