El Arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López condenó la violencia que se presentó este sábado en el estadio de futbol La Corregidora e hizo un llamado a la paz.

«Soy testigo de la bondad de la gente, quienes siempre han mostrado alegría y servicio en la comunidad; quienes aceleran los actos de violencia deben ser identificados y castigados. No permitamos que la agresividad de las calles pase a los lugares de esparcimiento; nuestro México no es un país violento no debe ser así y Querétaro es una ciudad bella con habitantes también que dan mucho prestigio a nuestro país».

Cabrera López dijo que se unía a la tristeza del pueblo, y recordó que su niñez y parte de su adolescencia la vivió en Querétaro.

«Que Dios nos libre de más violencia», expresó a través de su mensaje dominical.