Ante la sequía que afecta a la entidad en los últimos años y con el fin de evitar incendios forestales, el Gobernador Samuel Alejandro García Sepúlveda decretó zonas de veda para el uso de fuego que pueda afectar a los seres vivos, al medio ambiente y los recursos naturales.

En el Periódico Oficial del Estado con fecha del 9 de febrero del 2022, se publica que se establecen como zonas de veda todas aquellas áreas cubiertas de vegetación, árboles, pastizales, maleza y matorrales en general.

Para tal efecto, se prohíben las fogatas a fuego abierto para recreación, preparación de alimentos, chamusco de nopales y magueyes, festejos campestres, entre otras. También no se pueden realizar quemas para preparación de forrajes para el ganado, el mantenimiento de caminos y brechas de conducción eléctrica y basura o desperdicios contaminantes.

De igual forma y como acciones preventivas se recomienda no abandonar fragmentos de vidrio, cristales, espejos  botellas que, por la acción de los rayos solares pueden convertirse en una fuente de calor, así como el encender cigarrillos, cerillos o encendedores que puedan provocar un incendio dentro delas zonas forestales.

El documento establece que la o las personas que causen algún incendio forestal de manera intencional o imprudencial, podrán ser sujetas a las sanciones establecidas en la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable así como en el Código Penal del Estado de Nuevo León.

Dicho acuerdo entra en vigor a partir de esta publicación y hasta el 31 de agosto del presente año.

Este decreto va de conformidad con lo dispuesto por el artículo 3, fracciones I, III, IV y V de la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable del Estado de Nuevo León, en donde se considera de utilidad pública la conservación, protección y restauración de los ecosistemas forestales, la protección y conservación de los suelos con el propósito de evitar su erosión.

Mientras que los artículos 11 y 81 de la misma Ley dice que corresponde al Titular del Poder Ejecutivo el establecer vedas para el uso del fuego en determinadas áreas forestales.

Cabe destacar que el Programa de Manejo de Fuego 2020-2024 refiere que la mayor parte de los incendios forestales en México son originados por causas relacionadas con las actividades humanas.

También, según datos de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), durante el 2020 se presentaron 44 incendios forestales en Nuevo León, los cuales afectaron una superficie de mil 453 hectáreas. Entre las principales causas que dieron origen a los mismos se encuentran fogatas, actividades agropecuarias, fumadores y quema de basureros, entre otros.