Ante un pronóstico de 40 grados centígrados, cero precipitaciones y solo cinco días de vida de la Presa Cerro Prieto las autoridades estatales prevén dos semanas «muy difíciles» en cuanto a suministro de agua potable a la población.

Juan Ignacio Barragán, director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey, informó en rueda de prensa que las fuertes temperaturas y la falta de lluvia han disminuido la capacidad del acuífero.

Eso es que de los mil 600 litros por segundo que esperaban incorporar solo están alcanzando mil litros por segundo, explicó.

Cuestionado de cuándo se normalizaría la situación, el funcionario dijo:

«Solo se va a normalizar cuando haya lluvias importantes»

Ante ello, pidió a la población extremar el cuidado del agua. Como ejemplo mencionó que este lunes la mayoría de los tanques de almacenamiento no alcanzaron a llenarse ante la alta demanda registrada ayer, al subir la temperatura entre 40 y 42 grados centígrados.

Barragán indicó que la baja en los tanques ocasionó desde temprana hora falta de agua en la zona norponiente del área metropolitana -García, San Nicolás y Escobedo- y en la zona sur -Monterrey y Guadalupe-.

El funcionario dijo que la falta de suministro por la red se suple mediante entrega de agua en pipas, para lo que cuentan con 306 pipas, de las cuales operan 285.

La dotación de agua en pipas o cisternas estacionarias diarias abarca a 393 mil personas por día, informó Martha Herrera, secretaria de Sustentabilidad al participar en la conferencia.

Además de existir 414 cisternas fijas en 20 municipios.

Cerro Prieto

La vida útil de la presa Cerro Prieto se estima sea hasta el próximo viernes, informó Juan Ignacio Barragán.

Explicó que el nivel de la presa es ya casi cero, y ese volumen esperan compensarlo con la entrega de agua por parte de agricultores de Montemorelos y General Terán, quienes donarán parte de sus agua para riego.

En cuanto a la Presa La Boca, dijo que ya se concluyeron los trabajos para bombear agua menos turbia, pero también su volumen va a la baja.

Al dejar de contar con agua de ambas fuentes la situación en la zona sur del área metropolitana se complicará, por lo que se espera continuar con la incorporación de pozos. Sin embargo, ante la falta de lluvias el acuífero también se está agotando.

Como ejemplo Barragán mencionó que el manto de La Estanzuela hace unos días, después de las lluvias, enviaba 500 litros por segundo, pero al ser tan somero, hoy envía solo 5 litros por segundo.

Expresó que también se trabaja en la modulación de presiones en la distribución, lo que les permite distribuir el agua de una mejor manera, para lograr que llegue a las zonas más alejadas o altas.