Por: Jorge Maldonado Díaz

Luego de los lamentables acontecimientos registrados en el Penal de Apodaca el pasado viernes, el Gobierno de Nuevo León enfrenta un nuevo problema, el 68 por ciento de las mujeres privadas de la libertad que se encuentran en el Centro de Reinserción Femenil del estado, tienen alguna adicción.

Lo anterior quedo revelado tras la realización de un Diagnóstico Estatal de Supervisión Penitenciaria 2021 por parte de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Por si esto no fuera suficiente, el resultado estableció que en ese centro de readaptación no cuenta con programas para ayudar a una interna a salir de este grave problema.

El documento, emitido en diciembre pasado por la CEDHNL, señaló que en total hay 288 personas privadas de la libertad que presentan algún tipo de adicción, de las 422 registradas en el centro penitenciario.

Se constató que carecen de programas para la desintoxicación voluntaria y tratamiento de
adicciones”, mencionó la CEDHNL en el Diagnóstico.
 
“Además de la falta de programas para la atención de personas con discapacidad
psicosocial, y no cuenta con personal de psiquiatría”.

Al dar a conocer el dictamen final como calificación, el Centro de Reinserción Femenil obtuvo un7.29 en el Diagnóstico.

La evaluación que se hizo fue en temas como los derechos de Integridad Personal, Estancia Digna, Condiciones de Gobernabilidad, Reinserción Social y Grupos en situación de vulnerabilidad.

La CEDHNL indicó en el Diagnóstico que, contrario a la Ley de Seguridad Pública del Estado, es insuficiente el personal de seguridad y custodia, por lo que se recomendó elaborar nuevos reglamentos internos y homologados, protocolos de actuación en caso de incidentes violentos como motines, riñas, homicidios y/o suicidios, para detección de tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes.

Además, los centros penitenciarios carecen de personal especializado en psiquiatría para su asistencia médica y cuidados, así como el debido tratamiento para personas con adicciones.

Los dormitorios carecen de mantenimiento, las tuberías presentan fugas, la mayor parte del drenaje está obstruido y existen conexiones eléctricas improvisadas y falta de higiene en los baños generales.

A septiembre del 2021, la CEDHNL cuantificó que había 8 mil 729 personas privadas de la libertad en los Centros de Reinserción Social, lo que representa el 88.41 por ciento de la capacidad en conjunto.