Por: Jorge Maldonado Díaz

Una iniciativa de reforma a la Ley de Agua Potable y Saneamiento y a la de Desarrollo Urbano es la que presento la bancada del PAN del Congreso Local para obligar a que en los nuevos desarrollos y en los edificios públicos del Estado y de los Municipios haya sistemas de captación de agua pluvial.

La propuesta la entregó en la Oficialía de Partes el diputado Luis Susarrey Flores en compañía de integrantes de la Sociedad Mexicana de Aguas.

Al ser entrevistados, señalaron que este tipo de acciones eran indispensables ante la fuerte sequía que ha venido padeciendo en estado y sobre todo para hacerle frente a la falta de agua.

En el documento que entregaron para que este sea canalizado a una de las comisiones y posteriormente se someta ante el pleno se contemplan cambios a los artículos 7 y 9 Ley de Agua Potable y los artículos 74 y 237 de la Ley de Desarrollo Urbano.

Esta iniciativa surge de la sociedad civil, de un grupo de expertos y básicamente lo que busca es que tengamos la capacidad y la infraestructura para poder aprovechar al máximo el agua y que estemos preparados para enfrentar las crisis hídricas”.

“En este caso, son reformas a la Ley de Agua Potable y Saneamiento y a la de Desarrollo Urbano para establecer, en primer término, el obligar al Estado y a los Municipios a que todas las instalaciones, edificios y espacios públicos, que tengan las características y las factibilidades, se instalen sistemas para la captación de agua”, expuso el legislador panista.

Enrique Reyes y Santos Sáenz, presidente y vicepresidente de la Sociedad respectivamente señalaron que la medida se por obligación.

Es decir, que los desarrolladores de nuevos conjuntos habitacionales, industriales y de servicios construyan instalaciones para la recolección de agua pluvial y el tratamiento de aguas residuales.

Todo esto con el objetivo de que sea aprovechada para el riego de áreas verdes o en actividades que no requieran de agua potable.

Lo que buscamos es actualizar el cómo se hacen las cosas en la Ciudad”, añadió Sáenz, “el que podamos adecuarnos a aprovechar el agua de lluvia, a aprovechar el agua tratada, que en otras partes del mundo son ya una fuente de abasto de cajón.

“Ahorita el que una edificación tenga un manejo de agua sostenible es una sugerencia, no es una obligación, así que lo que buscamos el que sea una obligación”, puntualizaron.