Por: Jorge Maldonado Díaz

Ante la difícil situación en la que quedan las víctimas de una persona que fue desaparecida, la bancada del PRI en el Congreso Local exhortó a la Secretaría de Salud y a la Comisión Estatal de Atención a Víctimas brindarles atención psicoemocional.

La Diputada local del PRI, Lorena de la Garza Venecia lamentó que durante las últimas semanas se ha evidenciado, a través de los medios de comunicación, el sufrimiento que pasan las familias a causa de la desaparición o por no localizar a sus seres queridos.

Lo anterior a pesar de ser buscadas por las instituciones encargadas, mediante los protocolos establecidos para ello.

La legisladora local también planteó implementar un programa de mediadores que apoyen a los familiares en los hogares donde exista un reporte de persona no localizada, por si el suceso es causa de problemas familiares.

Este exhorto busca extender, a manera de apoyo para las familias de personas desaparecidas, a través de atención psicoemocional para que puedan contar con mayor fortaleza en su lucha por encontrar a sus seres queridos”.

“Para el caso de las personas no localizadas, se considere los motivos por los cuales se ha dado la situación, y en caso de que tenga que ver con violencia o conflictos familiares, se le proporcione ayuda de  profesionales en la materia como mediadores y se puedan subsanar el círculo familiar y su reintegración de manera integral y se beneficien todos los actores; para de esta manera hacer más llevadera una carga que sin duda alguna es de los sufrimientos más grandes que una persona puede vivir”, añadió.

La Diputada local priísta aseguró que las víctimas secundarias son los familiares de las personas desaparecidas, quienes viven con la terrible angustia al desconocer el paradero de sus seres queridos.

Lamentablemente la familia comienza a presentar signos de desgaste físico y psicológico que con el pasar de los días se agudiza”.

“Los familiares son vulnerables y pueden generar un duelo suspendido, es decir, alteraciones que impiden procesar una pérdida dolorosa, teniendo como consecuencia una serie de reacciones psicológicas como estrés, ansiedad, sentimiento de culpa, tristeza y angustia”, añadió.

De acuerdo a cifras reveladas por el Comité de las Naciones Unidas contra la Desaparición Forzada (CED); al 26 de noviembre de 2021, estaban registradas oficialmente como desaparecidas en México 95 mil personas.