En el Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora el 10 de octubre de cada año, el Rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), Santos Guzmán López, exhortó a la comunidad universitaria a que cada día se ocupen de ella.

Con una serie de actividades en la Facultad de Psicología, como la instalación de un termómetro de la depresión, la toma de una fotografía denominada “Por la salud mental”, una red de escucha para estudiantes y personal administrativo, así como un ciclo de conferencias, fue como la dependencia universitaria conmemoró esta efeméride.

“Felicito a la facultad por hacer de este día algo importante para la Universidad, pero los invito a que no solo sea este día, sino que nos comprometamos toda la comunidad universitaria a que todos los días estemos preocupados por nuestra salud mental”, recalcó Guzmán López.

Durante el mensaje del coordinador de la Facultad de Psicología de la UANL, José Armando Peña Moreno, resaltó que hay que ser conscientes de que la salud mental tiene un impacto directo en la forma de pensar, sentir y actuar, porque determina cómo respondemos ante el estrés, la forma de relacionarnos con otras personas y en la toma de decisiones.

“Esto nos compromete a seguir trabajando arduamente con nuestra labor desde las diferentes áreas y contexto de aplicación. Nuestro compromiso como profesionales de la salud mental será prevenir e intervenir por una salud de calidad y digna que fomente el bienestar integral en cada uno de los individuos. La salud mental es una prioridad para la
UANL”, señaló Peña Moreno.

La salud mental postpandemia

De acuerdo con la Unidad de Servicios Psicológicos de la UANL, después de la pandemia por COVID-19, los casos de respuestas depresivas, ansiedad, duelos no resueltos por la pérdida de un familiar y el estrés postraumático al resultar positivo por coronavirus han incrementado.

“En la Unidad hemos tenido un incremento del 30 por ciento de las atenciones comparadas con las de antes de la pandemia. Y todo lo anterior lo vemos manifestado en diferentes escenarios como conductas suicidas, dificultad para laborar, socializar y llevar la calidad de vida que se tenía antes”, detalló el coordinador del Departamento de Atención a Urgencias de la Unidad de Servicios Psicológicos, Guillermo Rocha González.

El psicólogo de la Universidad Autónoma de Nuevo León explicó que con estos pacientes han estado trabajando con el objetivo de que se adapten nuevamente a la situación actual, ya que hay personas que siguen presentando una calidad de vida como si estuvieran durante el momento más crítico de la pandemia en 2020.

“No hay que esperar hasta que haya una afectación o hasta tener un conflicto grave. Si ya estoy mostrando una complicación para dormir, socializar, convivir o cambios en el estado de ánimo o sueño, es necesario buscar ayuda profesional”, puntualizó Rocha González