Para Francisco Villa, Álvaro Obregón era ladino, labioso y poco confiable; para el sonorense, Villa era irascible, voluble y visceral, dos personalidades divergentes cuya relación terminaría en un desenlace fatal, que será abordado en detalle en Historia a debate. Villa-Obregón, el 21 de junio a las 19:00 horas en el Museo de Historia Mexicana.

Los invitados a debatir son Eduardo Cázares Puente, quien analizará la actuación y personalidad de Álvaro Obregón y Héctor Jaime Treviño Villarreal, quien hará lo propio con el Centauro del Norte.

Historia a Debate es un programa que presenta 3 Museos en coordinación con la Sociedad Nuevoleonesa de Historia, Geografía y Estadística, A. C. y el Centro de Estudios Políticos e Historia Presente, A. C., en el contexto del centenario luctuoso del Centauro del Norte (20 de julio).

El coordinador del ciclo y moderador de esta charla, Óscar Tamez Rodríguez, comenta que ambos caudillos tenían personalidades recias y divergentes, y pese a compartir los ideales revolucionarios, “Villa se concentra en el idealismo político; el sonorense es pragmático y cambiante según las circunstancias y los intereses”.

Ambos militares tuvieron encuentros que terminaron en desencuentros, y se enfrentaron en combate, en uno de ellos pierde el brazo Alvaro Obregón.

Uno de los episodios más álgidos de su relación inició el 16 de septiembre de 1914 cuando celebran la Independencia de México, en Chihuahua, el jefe del Ejército del Noroeste estaba mediando entre el Centauro del Norte y Venustiano Carranza, entonces presidente del país, a quien le pidieron cumplir con el plan de Guadalupe.

El 17 de septiembre de 1914, Villa se siente traicionado por Obregón y ordena su fusilamiento por incumplir el acuerdo de contener al General José María Maytorena, sin embargo, es disuadido por otros revolucionarios.

No obstante, 24 de septiembre Francisco Villa pide detener el convoy en donde viajaba Obregón, que se dirigía a Chihuahua, sin embargo, se logra escapar.

Venustiano Carranza incumple el acuerdo tomado en Chihuahua, el 24 de octubre de 1914, y refuta las expresiones de Villa publicadas en el manifiesto circulado por el jefe de la División del Norte.

Carranza pagaría la lealtad del grupo Sonora otorgando el grado de general brigadier a Plutarco Elías Calles y nombraría a Obregón jefe del Ejército Constitucionalista. Más tarde, Carranza y Villa serían víctimas fatales de la ambición y poder del grupo sonorense.

Al arribo de Obregón a la presidencia, Villa se comprometió a retirarse de la vida pública y no participar en política, acuerdo que cumplió hasta su muerte.

Sin embargo, la opinión pública señalaba  a Villa como candidato viable para la gubernatura de Durango, y él hizo público su apoyo para que Raúl Madero o Adolfo de la Huerta como los mejores candidatos a la presidencia, “el Centauro había logrado la tormenta perfecta a su rededor, lo querían inactivo, al margen o muerto los terratenientes de Chihuahua, el gobernador de Durango, el presidente y su sucesor, los EUA para firmar los tratados de Bucareli y otros grupos más, la conspiración acabaría con su vida el 20 de julio de 1923”, señala Oscar Tamez.

Eduardo Cázares Puente y Héctor Jaime Treviño participan en el debate del miércoles 21 de junio a las 19:00 horas, con el tema Villa y Obregón, en el auditorio del Museo de Historia Mexicana, si desea más información puede consultar la página www.3museos.com o ponerse en contacto a través de las redes sociales de 3 Museos.