El número de muertos por los potentes terremotos que vivieron el lunes Turquía y Siria superó este miércoles los 12 mil Según las autoridades, 9 mil 57 muertes se produjeron en Turquía y 2 mil 992 en Siria, mientras continúan las tareas de rescate para encontrar supervivientes entre los escombros.
Asimismo, en los dos países golpeados por el desastre se contabilizan también más de 58 mil heridos, muchos con fracturas y cortes de gravedad.
En Turquía, un total de 6 mil 444 edificios en diez provincias del sureste colapsaron por los fuertes terremotos, según el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, quien este miércoles reconoció que inicialmente las autoridades tuvieron algunos problemas en las tareas de rescate.
Además, Erdogan anunció ayudas económicas para las víctimas por valor de 10.000 liras turcas (495 euros/530 dólares) por persona damnificada.
Por su parte, en Siria, 1.262 personas han perdido la vida y otras 2.285 han resultado heridas en zonas controladas por Damasco, mientras que otras 1.730 han fallecido y 2.850 han sufrido lesiones en áreas opositoras.
En las zonas controladas por Damasco, casi 300 mil personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares como consecuencia de los seísmos, mientras que el Gobierno de Al Asad abrió un total de 180 refugios para acoger a los afectados y desplegó 157 unidades móviles a las provincias más afectadas.
Durante dos días y dos noches desde el sismo de magnitud 7,8, miles de socorristas trabajaron en temperaturas gélidas para encontrar a sobrevivientes bajo los edificios derrumbados a ambos lados de la frontera.
El responsable de la Media Luna Roja turca, Kerem Kinik, advirtió que las primeras 72 horas eran críticas en las labores de rescate, pero señaló que estas se veían entorpecidas por las «severas condiciones meteorológicas».
Aun así, los trabajadores de emergencia pudieron salvar el miércoles a varios niños encontrados bajo un bloque colapsado en la castigada provincia turca de Hatay, donde municipios enteros desaparecieron.
A medida que pasan las horas, también crece la frustración y el enfado por la escasa ayuda que llega a algunas áreas situadas en zonas de difícil acceso o afectadas por los conflictos geopolíticos de la zona.
La ayuda a Siria es una cuestión delicada para numerosos países occidentales.
Aunque está sancionado por Bruselas, el gobierno de Bashar al Asad hizo llegar una petición formal de ayuda a la Unión Europea, indicó Janez Lenarcic, el comisario comunitario de Gestión de Emergencias. Por ahora, Siria cuenta principalmente con la ayuda de Rusia, su aliado.