Cdmx.- La presidenta Claudia Sheinbaum reiteró su postura en contra de la prohibición de los narcocorridos, luego de que la Fiscalía del Estado de Jalisco acusó esta semana al grupo musical “Los Alegres del Barranco” por presunta apología del delito durante un concierto en Zapopan.
Durante su conferencia matutina de este miércoles, la mandataria federal aseguró que “no debe prohibirse, sino promover otra música”, al referirse al proceso judicial que enfrentan los músicos tras haber proyectado imágenes de un presunto capo del narcotráfico el pasado 29 de marzo, en un espectáculo realizado en territorio jalisciense.
“Desde nuestra perspectiva, desde mi perspectiva, más que prohibir es educar, orientar y que la misma gente y los mismos jóvenes vayan dejando de escuchar esa música”, declaró.
La presidenta insistió en que la censura no es el camino y que es preferible abrir el debate público y fomentar una transformación cultural a través de la educación.
Sheinbaum también mencionó —sin citar la fuente exacta— una encuesta que, según dijo, refleja un rechazo social a las canciones que promueven la violencia, incluidos no solo los narcocorridos sino otros géneros musicales que normalizan conductas delictivas.
“Hay un rechazo social. A la gente no le gusta. Y yo creo que este debate, como quiera que sea abierto, ha sido importante porque en la sociedad se discute si debe prohibirse, si no debe prohibirse, cuál es el impacto”, señaló.
El caso de Los Alegres del Barranco ha puesto en el centro del debate la delgada línea entre la libertad de expresión artística y la apología del crimen, especialmente en estados como Jalisco, donde recientemente se implementaron sanciones contra espectáculos públicos que promuevan la violencia.
La presidenta también hizo una distinción entre la forma musical y el contenido de las canciones. “El corrido tumbado no es per se malo, pues es una forma musical novedosa, innovadora que se ha generado por los jóvenes. El problema son las letras”, puntualizó.
El auge de los narcocorridos ha sido impulsado por artistas como Peso Pluma y Natanael Cano, quienes han alcanzado popularidad internacional, aunque también han sido objeto de polémica por las temáticas de sus canciones.
Como parte de su estrategia cultural, Sheinbaum recordó que su administración lanzó recientemente el festival ‘México Canta’, un concurso nacional dirigido a jóvenes de entre 18 y 34 años para promover la música regional mexicana con contenidos positivos y sin apología del delito.
“El objetivo es ofrecer alternativas, espacios y visibilidad a quienes están haciendo música con otros valores. No se trata de censurar, sino de abrir caminos”, afirmó.