Tras los hechos violentos ocurridos ayer en la avenida Aztlán donde un aficionado felino se debate entre la vida y la muerte, las directivas de los equipos de Rayados y Tigres iniciaron reuniones con el objetivo de abordar este tema y evitar más incidentes que empañen al futbol.
Mediante un comunicado, las directivas de ambas instituciones informaron sobre las reuniones donde buscan encontrar soluciones que no afecten a los aficionados.
Mientras tanto, la Fiscalía investiga estos hechos y sólo ha identificado a tres de los agresores del joven Rodolfo Manuel Palomo Gámez de 21 años quien se reporta como grave en el Hospital Universitario.
