Monterrey, N.L.- “Los tiempos lo exigen, que haya piedras fundamentales para las transiciones que vivimos. El cuerpo social está ahora convulsionando con justicia porque requerimos nuevas infraestructuras para continuar viviendo. Queremos que Armas y Letras pueda ir con los tiempos”, expresó Nohemí Zavala, editora de la revista de literatura, arte y cultura de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
La Feria del Verano de la UANL cerró con la presentación virtual del número 103 – 104 de Armas y Letras, edición especial enfocada en la escritura de mujeres bajo la perspectiva de lectoras y escritoras jóvenes.
En el evento transmitido por redes de la Casa del Libro de la UANL participaron Nohemí Zavala, editora de Armas y Letras; Minerva Reynosa, poeta y editora invitada en el presente número; y Lucinda Garza, booktuber y también colaboradora de la reciente entrega editorial.
Armas y Letras: un soporte entre los tiempos
“Armamos una edición dedicada en gran medida a la escritura de mujeres, hecha por autoras, y sobre todo a la crítica literaria también desde el punto de vista de escritoras jóvenes”, comentó la editora Nohemí Zavala
Agregó que la publicación de la UANL es un espacio que soporta el peso de los temas más trascendentales en nuestro tiempo.
“Me gusta que, en Armas y Letras, que tiene un peso como revista impresa, podamos depositar en buena medida la memoria de lo que sucede, a través de la Universidad. Sin duda, hay una demanda de circulación de contenidos, de generar sentido, lecturas que respondan a los cambios del momento.
“Y justo en este momento empiezo a pensar en la revista como un soporte no solamente en tanto medio de comunicación, sino por su historia y peso. Un soporte para aguantar hoy en día temáticas tan duras de afrontar como pudiera ser algo que queremos abordar en el siguiente número, el duelo en tiempos de la pandemia”, expresó la editora de la publicación de la UANL.
La lengua poética
La poeta y editora Minerva Reynosa detalló la importancia de la colaboración de Mikeas Sánchez, escritora chiapaneca cuya obra está escrita en zoque, lengua originaria de los pueblos antiguos.
“Su participación en este número es interesante porque nos cambia un poco el panorama y la perspectiva de lo que tenemos de la poesía, porque ella trabaja todavía con los elementos del pensamiento indígena, de la magia y los dioses.
“Pero haciendo una yuxtaposición con este pensamiento idiosincrático y también con la crítica del estado de las cosas, donde desgraciadamente el modelo socioeconómico que vivimos, las políticas socioculturales en este país haciendo que los pueblos originarios siempre tengan que estar en pugna”, dijo la editora invitada.
Con esta nueva modalidad de editor invitado, Armas y Letras busca expandir sus redes y ofrecer algo distinto a sus lectores.
