Una cifra récord que, sin ser del todo cierto, es la que oficialmente informan las autoridades de los países donde hace 10 días se registró un terremoto de 7.4 grados en la escala Ritcher.
Es difícil que un ser humano viva después de 100 horas atrapado, sin alimentos y en angustia, por lo que la esperanza de encontrar más personas con vida es casi nula.
Ante ello, Algunos cuerpos de rescate han regresado a sus países de origen, tal como lo es el equipo de México, que fue aplaudido y recibió muestras de agradecimiento por ciudadanos turcos y sirios por sus labores de auxilio.
Pero la ayuda sigue llegando al Medio Oriente; el secretario de Relaciones Exteriores en México, Marcelo Ebrard, compartió que se han enviado 100 toneladas de insumos médicos, alimentos, generadores de luz y colchonetas a Turquía, a pesar de que las autoridades mencionaron que comenzarían con el derrumbe de los edificios afectados.
Ante ello, el costo causado por la catástrofe ascendería a 84 mil millones de dólares para la recuperación de viviendas e infraestructuras y las pérdidas de ingresos.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan aseguró que el Estado completará la reconstrucción de las viviendas en el plazo de un año para poner al país de pie.