Por segundo año consecutivo, el Congreso de Nuevo León no logró aprobar el proyecto de Presupuesto 2025 debido a un empate en las votaciones del Pleno.
Las bancadas del PRI, PAN y PRD respaldaron el Paquete Fiscal, pero la abstención de Movimiento Ciudadano (MC), Morena, PT y el Partido Verde llevó al estancamiento, abriendo la posibilidad de recurrir a una reconducción presupuestaria basada en el ejercicio de 2023.
Carlos de la Fuente, coordinador del PAN, calificó la situación como “lamentable” y acusó a las bancadas de MC, Morena, PT y Verde de negarse a discutir el proyecto en el Pleno. Según De la Fuente, su grupo legislativo estaba dispuesto a negociar puntos clave, como la aprobación de una deuda de hasta 5 mil millones de pesos para proyectos de infraestructura, pero la falta de consenso frustró cualquier avance.
Por su parte, Ivonne Álvarez, presidenta de la Comisión de Presupuesto, aseguró que se cumplió en tiempo y forma con el análisis y ajustes al proyecto, incluyendo un ajuste del 3%. Álvarez lamentó que las propuestas no fueran discutidas y destacó que aún existe la posibilidad de un diálogo antes del 31 de diciembre.
En contraste, Miguel Ángel Flores, coordinador de MC, acusó al Ejecutivo estatal de modificaciones unilaterales en el presupuesto y criticó a otras bancadas por presionar con propuestas de última hora. “Estamos dispuestos a avanzar, pero no a beneficiar desproporcionadamente a municipios específicos”, señaló.
El gobernador Samuel García también ha sido señalado por varios legisladores como el principal beneficiario de la reconducción, pues esta le permitiría manejar recursos sin los ajustes que el Congreso pretendía realizar. Según Lorena de la Garza, presidenta del Congreso, la reconducción implica que el Estado dispondrá de 88 mil millones de pesos de libre disposición, lo que podría generar tensiones adicionales entre el Ejecutivo y el Legislativo.
Mientras tanto, el PAN y el PRI han pedido al Ejecutivo estatal presentar contrapropuestas claras, incluidas las actualizaciones catastrales y una distribución equitativa de recursos para municipios y organismos autónomos. Sin embargo, tanto Morena como MC han insistido en la necesidad de garantizar que los ingresos y egresos sean claros y estén alineados con programas sociales clave.
Aunque algunos legisladores mantienen la esperanza de retomar el diálogo y convocar a un periodo extraordinario antes del 31 de diciembre, la presidenta del Congreso dejó claro que la próxima fecha para sesionar sería el 8 de enero de 2025. Esto deja al estado en una situación de reconducción presupuestaria al menos temporalmente, limitando los recursos para nuevas obras como hospitales, escuelas y líneas del Metro.