El mexicano Guillermo del Toro, se ha llevado el Oscar con ‘Pinocchio’, cinta que desde que llegó a la pantalla se colocó como una de los grandes favoritos para quedarse con el premio en la categoría de Mejor Película Animada.

Esta es la tercera estatuilla para el director mexicano después de las dos obtenidas en 2017 gracias a ‘La forma del agua’.

En el teatro Dolby de Los Ángeles, el mexicano consiguió superar a cintas como «Turning Red» de Disney o «El Gato con Botas», convirtiendo así su proyecto de Stop Motion como la película de este género más premiada de la temporada.

De mano del actor Dwayne Johnson y la actriz Emily Blunt, el tapatío recibió su tercer estatuilla y quizá, la más especial, pues él mismo ha delcarado que «Pinocho» es uno de sus proyectos más entrañables.

A lo largo de la campaña rumbo al Oscar, el director mexicano ha abanderado una cruzada en defensa del gremio de quienes se dedican a la animación.

«La animación es el cine, la animación no es un género, la animación está lista para ser llevada al siguiente nivel estamos listos por favor ayúdennos a mantener la animación en al conversación», dijo Del Toro durante su discurso de agradecimiento.

 

Este debut en stop motion llegó de la mejor forma posible. Fue con una producción de Netflix en la que el director tuvo a su disposición la mejor tecnología y artesanos de la animación en Portland, Estados Unidos, Manchester, Inglaterra y Guadalajara, la ciudad natal del cineasta.