En un emotivo mensaje enviado desde el hospital Gemelli de Roma, el papa Francisco lamentó que el mundo se encuentre “en manos de poderes malignos” que someten a la humanidad a sus intereses y a la guerra. Sus palabras fueron leídas por el cardenal Michael Czerny durante la misa del Jubileo de los Voluntarios, celebrada este domingo en la Plaza de San Pedro ante 25 mil peregrinos.

Satanás intenta convencernos de que para los hambrientos no hay pan, menos aún de las piedras, ni los ángeles nos auxilian en las desgracias. En todo caso, el mundo está en manos de poderes malignos que aplastan a los pueblos con la altanería de sus cálculos y la violencia de la guerra”, expresó el pontífice en su homilía, en la que reflexionó sobre la tentación de Cristo en el desierto.

Francisco sigue hospitalizado, pero muestra mejoría

El papa Francisco, de 88 años, permanece hospitalizado desde hace 24 días debido a una neumonía bilateral que ha requerido altos flujos de oxígeno y una terapia intensiva. Sin embargo, el último parte médico indica que ha mostrado una “buena respuesta” al tratamiento y una leve mejoría gradual.

Debido a su estado de salud, el pontífice no pudo presidir la misa del Jubileo del Voluntariado, uno de los eventos centrales del Año Santo. No obstante, su homilía fue leída en su nombre, y el estandarte con su escudo fue colocado en la logia central de la basílica de San Pedro, simbolizando su presencia en la celebración.

Un reconocimiento al trabajo de los voluntarios

A pesar de su ausencia física, Francisco envió un mensaje de gratitud a los miles de voluntarios, cooperantes y miembros de Protección Civil reunidos en el Vaticano, reconociendo su entrega y servicio desinteresado.

Me alegra saludar a todos los voluntarios que hoy están presentes en Roma para su peregrinación jubilar. Les agradezco mucho, queridos voluntarios, porque siguiendo el ejemplo de Jesús, ustedes sirven al prójimo sin servirse del prójimo”, afirmó.

El pontífice destacó la labor de quienes acompañan a enfermos, personas que sufren, presos, jóvenes y ancianos, asegurando que su entrega “infunde esperanza en toda la sociedad”.

En los desiertos de la pobreza y de la soledad, tantos pequeños gestos de servicio gratuito hacen germinar brotes de una nueva humanidad”, concluyó.

Tras la misa, la Santa Sede difundió un mensaje especial del papa Francisco durante el rezo del Ángelus. Mientras tanto, en la tarde, la Curia Romana inició sus ejercicios espirituales de Cuaresma en el Aula Pablo VI, en comunión con el pontífice, quien sigue en recuperación en el hospital.

Aunque su estado de salud sigue siendo delicado, los informes médicos son optimistas y se espera que en los próximos días pueda continuar con su proceso de recuperación.