CDMX.- La activista y premio Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, se reunió este martes con la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, en el Palacio Nacional. La joven paquistaní, conocida por su incansable lucha a favor del derecho a la educación de las niñas, felicitó a la mandataria mexicana por su reciente llegada al cargo, resaltando la importancia del liderazgo femenino.

«Siempre es alentador cuando una mujer alcanza posiciones de poder. Esto nos da esperanza de un futuro más seguro y justo para todas las mujeres», expresó Malala, quien sobrevivió a un atentado talibán en 2012 a raíz de su activismo por la educación en Pakistán. «Quiero felicitarla, sé que probablemente lleva menos de un mes en este cargo, pero ya está haciendo historia», añadió.

Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ocupar la presidencia de México, compartió en sus redes sociales un breve video de su conversación con Malala, donde ambas coincidieron en la necesidad de garantizar el acceso a la educación para niñas y jóvenes en todo el mundo.

«Las mujeres podemos ser lo que queramos ser», escribió Sheinbaum en su publicación.

Durante el encuentro, la presidenta mexicana subrayó que «es tiempo de mujeres» y destacó la importancia de que más mujeres asuman roles protagónicos en todos los ámbitos de la sociedad. «Podemos ser bomberas, podemos ser policías, y también podemos ser presidentas», señaló.

Malala, quien se ha convertido en un ícono global por su defensa de los derechos de las niñas a la educación, reconoció el simbolismo y la relevancia de que una mujer lidere una nación como México.

«Su liderazgo es una fuente de inspiración para muchas de nosotras alrededor del mundo», apuntó.

 

A sus 15 años, Malala sufrió un ataque perpetrado por el régimen talibán cuando regresaba de la escuela, luego de desafiar las prohibiciones impuestas sobre la educación femenina en su país. Desde entonces, su lucha ha trascendido fronteras, llevándola a convertirse en la persona más joven en recibir el Premio Nobel de la Paz en 2014.

En la charla, ambas líderes reafirmaron su compromiso con la igualdad de género y el acceso universal a la educación, coincidiendo en la urgencia de que los gobiernos del mundo adopten políticas públicas que garanticen el derecho de las niñas a estudiar y desarrollarse plenamente.

El encuentro entre Malala y Sheinbaum marca un punto importante en el panorama internacional, subrayando el papel cada vez más relevante de las mujeres en el ámbito político y social.