La sustancia química que propició malos y fuertes olores en la mayor parte del área metropolitana de Monterrey la noche del lunes y madrugada del martes, se emanó desde la Refinería de PEMEX, ubicada en Cadereyta, Nuevo León.informó la Secretaría de Medio Ambiente.

En un reporte preliminar, la dependencia, señala que el inició de los reportes se localizaron en los municipios de Cadereyta, Juárez y Guadalupe.

Indica que las emisiones de dióxido de azufre (SO2) son habituales de la Refinería de PEMEX, ubicada en Cadereyta y durante el lapso mencionado se combinaron con otras emisiones nocturnas que se presentan en el área metropolitana.

«El gas tenía un olor áspero y picante provocando síntomas agudos en la población específicamente en las vías respiratoria y en la boca», señala el reporte. «Los síntomas reportados por la población coinciden con los provocados por la inhalación de distintos gases, entre ellos, el dióxido de azufre».

Conforme al muestreo de las estaciones de monitoreo se reportó una inusual alta concentración de gas; sin embargo, son concentraciones no detectadas con importancia en el aire. Este gas es más pesado que el aire. Durante el incidente se presentaban condiciones meteorológicas propicias para que la nube de contaminación se esparciera muy cercana al suelo.

Ciudadanos reportaron en algunas zonas que el agua en el pavimento tenía un aspecto espumoso.

«Todo indica que la causa fue las emisiones nocturnas habituales de la Refinería de dióxido de azufre (SO2) combinado con el SO2 de otras fuentes».

El reporte preliminar de la Secretaría de Medio Ambiente indica que la población estuvo más expuesta al contaminante, debido a las condiciones meteorológicas.

La dependencia informa que continuará con el proceso de investigación y dictaminación de los acontecimientos para determinar la fuente original y mayoritaria de la emisión del dióxico de sodio (SO2).