Por: Jorge Maldonado Díaz

En aras de seguir con el proyecto de mejorar la movilidad en Nuevo León, este domingo arribaron más unidades nuevas a la entidad que se sumarán a distintas rutas urbanas.

De acuerdo con el Instituto de Movilidad y Accesibilidad del Estado fueron 50 los camiones que llegaron procedentes desde Saltillo, Coahuila en donde la carretera prácticamente se pinto de color verde.

Sin embargo, se informó que para la próxima semana arribarán otras cincuenta unidades más para sumar un total de 100 en esta semana.

Estos camiones serán distribuidos estratégicamente en los sectores donde aún se presentan algunas deficiencias en el transporte público, pero sobre todas las cosas en donde más urge un buen servicio.

Las autoridades solicitaron paciencia a los usuarios y se comprometieron a que seguirán en pie con la meta de mejorar el transporte público.

Hernán Villarreal, secretario de Movilidad, comentó que en estas semanas se sigue llevando a cabo la entrega de las unidades a transportistas.

Juan Manuel Valdez Gaytán, director del Instituto de Movilidad aseveró que durante los meses de julio y agosto, han estado llegando a la entidad más camiones urbanos de las diferentes empresas que ganaron las licitaciones.

“Hemos estado entregando cada semana unidades distintas a diferentes rutas del área metropolitana, así como en la periferia, zonas que antes no eran atendidas con transporte urbano”.

“Todas las unidades son climatizadas, agradecemos que así haya sido por los calorones que se han venido presentando, serán 2 mil unidades para renovar todo el transporte urbano, estas unidades están llegando de manera continua”.

“El proceso a sido complicado, pero nada ni nadie nos va a detener, no podrán impedir la mejora del transporte público, en donde el Gobierno estatal, empresarios y ciudadanos vamos construyendo el mejor transporte para Nuevo León”, expuso.

El transporte camionero está en crisis, ya que desde hace casi una década no se ha autorizado un alza a las tarifas de 12 pesos a los transportistas, que disminuyeron las unidades en circulación de unas cinco mil a poco menos de dos mil 500, lo que ha propiciado caos, larga espera, hacinamiento y pérdida de tiempo al transportarse.