La Organización Mundial de la Salud confirmó que este jueves llegará a Polonia el primer envío con asistencia médica para Ucrania. 

La remesa incluye 36 toneladas métricas de suministros para la atención de traumatismos y operaciones quirúrgicas de urgencia que servirán para atender a 1000 pacientes. El resto de los suministros sanitarios se usarán para satisfacer las necesidades de 150.000 personas.

En rueda de prensa en Ginebra sobre la evolución del COVID-19, el director general de la agencia de la ONU, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus indicó que antes del inicio de la ofensiva en Ucrania la Organización pudo distribuir suministros de emergencia en 23 hospitales, aunque reconoció que en estos momentos no tienen acceso a los suministros almacenados previamente en Kiev.

Hay una necesidad urgente de establecer un corredor para garantizar que los trabajadores humanitarios y los suministros tengan un acceso seguro y continuo para llegar a las personas necesitadas”, solicitó.

Posteriormente, Tedros explicó que antes del inicio de la ofensiva en Ucrania el país había experimentado un reciente aumento de casos de COVID-19.

Tras este dato, añadió que el bajo número de pruebas realizado desde el comienzo del conflicto el pasado jueves apuntan a la posibilidad que haya una importante transmisión de la enfermedad sin detectar.

Junto con la baja cobertura de vacunación, esto aumenta el riesgo de que un gran número de personas desarrollen una enfermedad grave. La escasez crítica de oxígeno tendrá un impacto en la capacidad de tratar a los pacientes con COVID-19 y muchas otras enfermedades”, alertó.

Al mismo tiempo, indicó que al menos tres de las principales plantas proveedoras de oxígeno de Ucrania han cerrado, y que continúan buscando formas de conseguir oxígeno en los países vecinos y transportarlo de forma segura a donde se necesita.

El doctor Mike Ryan, director de emergencias de la Organización, complementó la información y explicó que la semana pasada unas 2000 personas necesitaban oxígeno por causas relacionadas con el coronavirus y que ese número aumentará con las intervenciones quirúrgicas u otras causas médicas.

Tanto Tedros como Ryan apuntaron la posibilidad de que los grandes desplazamientos de población contribuyan a un incremento de la transmisión de la enfermedad, una circunstancia que probablementeaumentará la presión de los sistemas sanitarios de las naciones vecinas a Ucrania.