California, EU
Las investigaciones sobre el gigantesco y mortifero incendio que afecta al estado de California se están orientado a considerar el origen en la principal compañía eléctrica en la zona.
Pacific Gas & Electric (PG&E) reveló la semana pasada a los reguladores que halló un «problema» en una línea de alta tensión cercana al área donde se declaró el incendio solo unos minutos antes de que se iniciasen las llamas, pero por el momento no han trascendido más detalles.
De ser encontrada causante del fuego que se ha cobrado las vidas de por lo menos 63 personas y en el que más de 600 permanecen desaparecidas, de acuerdo con las últimas cifras, la empresa podría tener que abonar compensaciones multimillonarias que con toda probabilidad la dejarían en la quiebra.
Pese a que la investigación todavía está abierta, un grupo de ciudadanos afectados por el bautizado como incendio «Camp Fire» ya ha demandado a la proveedora eléctrica, que con más de cinco millones de abonados es la mayor de California y la segunda más grande de EE.UU.
El condado de Butte, en el norte del estado, dio a conocer ayer una cifra provisional de 63 muertos por la conflagración que se declaró hace 8 días, alzándose en la más letal de la historia californiana.