Valparaíso, Chile.- Una tragedia sin precedentes se desata en la región de Valparaíso, en el centro de Chile, donde devastadores incendios forestales han cobrado la vida de al menos 123 personas, según informó este lunes el Servicio Médico Legal (SML), organismo estatal encargado de proporcionar el balance de víctimas durante esta crisis.
La ciudad de Viña del Mar y sus áreas circundantes, como Quilpué y Villa Alemana, son las más afectadas, con la mayoría de los fallecidos registrados en esta zona, según la fuente mencionada.
El presidente chileno, Gabriel Boric, describió la situación como «la tragedia más grande que hemos vivido como país desde el terremoto del 27 de febrero de 2010».
Con varios focos ya extinguidos cerca de los cerros más densamente poblados, se empiezan a evidenciar colinas residenciales reducidas a cenizas y largas filas de autos en las calles, aunque aún se desconoce si pertenecen a vehículos estacionados o de personas que intentaban evacuar.
La alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, y el Gobernador de la región de Valparaíso, Rodrigo Mundaca, han informado que hay varios cientos de personas reportadas como desaparecidas ante la policía.
La cadena de incendios comenzó el viernes en el parque nacional del Lago Peñuelas y se propagó rápidamente hacia las localidades de la costa debido al viento y las temperaturas extremas. Las rutas hacia las playas del Pacífico fueron cerradas, y varios focos de fuego se expandieron rápidamente, quemando áreas pobladas y colapsando las rutas alternativas de evacuación de miles de personas.
Según un informe de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), el incendio más significativo se encuentra en la Reserva Lago Peñuelas, al costado de la principal autopista de la zona, y ha consumido más de 8.000 hectáreas.
Esta tragedia se desarrolla en medio de una ola de calor con máximas temperaturas, afectando al Cono Sur americano, donde el fenómeno climático de El Niño se intensifica debido al calentamiento global causado por la actividad humana, según expertos. Alertas por calor sofocante se mantienen en Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil y Chile, ampliando la magnitud de esta emergencia.