Un pescador danés hizo un sorprendente hallazgo en las aguas de Langeland: una bomba de 130 kilogramos de la Segunda Guerra Mundial. El descubrimiento llevó a una cuidadosa operación de detonación controlada realizada por las fuerzas armadas danesas.
El ministro de Defensa de Dinamarca informó sobre el incidente, detallando que la detonación controlada tuvo lugar a 12.5 metros de profundidad en el Mar Báltico. El Ejército danés trasladó la bomba a una distancia segura de 3.2 kilómetros de la costa para su eliminación, luego de recibir la alerta de un pescador que la capturó en su red.
Ayn Amripur, representante de las fuerzas armadas, explicó que los pescadores están capacitados para manejar tales situaciones y que, al encontrar munición en sus redes, se comunican con las autoridades, lo que desencadenó la intervención del servicio naval de desactivación de explosivos para su evaluación.
La detonación generó una columna de agua en el Mar Báltico, pero afortunadamente no provocó daños materiales ni lesiones a personas. Este tipo de hallazgos no son inusuales, ya que varias bombas de la Segunda Guerra Mundial en Dinamarca no explotaron y quedaron en tierra o en aguas tranquilas.
🇩🇰 Una bomba de la Segunda Guerra Mundial fue detonada en Langeland, una isla al sur de Dinamarca. La explosión se produjo a 15 metros bajo la superficie, según el departamento de defensa del país. pic.twitter.com/puCXzOM8Za
— Noticias Tendencias (@ntendenciasec) December 7, 2023