Por: Jorge Maldonado Díaz
En plena sesión extraordinaria, los diputados del Congreso Local tuvieron que subir a la tribuna a leer los dictámenes de las cuentas públicas con paraguas.
Lo anterior simple y sencillamente porque a consecuencia de la fuerte lluvia que comenzó a caer, el agua se filtró por el techo dejando al descubierto una gran cantidad de goteras.
El agua comenzó a caer en algunos curules de los legisladores, incluso en el espacio ocupado por la mesa directiva.
A consecuencia de eso, salieron a relucir los paraguas por parte de los diputados para protegerse del agua.
Personal de intendencia apoyo a los representantes del pueblo llevando tinas que pusieron en sillas, escritorios y en el piso, precisamente donde estaba cayendo las gotas de agua.
La diputada panista y Presidenta de la Comisión de Hacienda del estado Mirna Grimaldo Iracheta pidió disculpas por los inconvenientes, pero dijo que era necesario subir con el paraguas para proteger los dictámenes.
“Quiero pedir una disculpa por los inconvenientes que se están presentando en este momento, tengo que subir con un paraguas porque está cayendo agua y se están mojando los dictámenes”.
“Cúbranse con lo que puedan, ya pusieron algunos botes de agua para poder seguir con la sesión, ahora sí que cada quien lea los dictámenes en donde más les convenga para protegerse del agua”, aseveró la legisladora del PAN.
Y así de manera chusca, Grimaldo Iracheta estuvo leyendo los dictámenes de las cuentas públicas con el paraguas abierto.
Esta no es la primera vez que la lluvia exhibe las pésimas condiciones en que se encuentra el Congreso Local, ya en varias ocasiones, los diputados han tenido que estar sesionando bajo una gran cantidad de goteras.
Incluso ya en una ocasión, los legisladores acordaron llevar a cabo las reparaciones al recinto legislativo, pero no se concretó del todo.
Son tan malas las instalaciones que una ocasión ingresaron a la sala de sesiones murciélagos que ocasionaron que más de una diputada se espantara.
En las oficinas administrativas y de las diferentes bancadas encontraron una guarida de tlacuaches en las instalaciones eléctricas del techo, los cuales tuvieron que ser atrapados con la instalación de trampas.
