El New York Times informó que de acuerdo a una fuente anónima, el presidente Joe Biden se mantiene en la lucha por la reelección pero también sabe que debe convencer a los electores en los próximos debates.
«Él sabe que si hay dos eventos más como ese, estaremos en un lugar diferente» para el próximo fin de semana, dijo el aliado, refiriéndose al desempeño vacilante y desenfocado de Biden en el debate.
Las declaraciones fueron negadas por Andrew Bates, portavoz de la Casa Blanca, es una afirmación «absolutamente falsa».
La fuente señaló que Biden renunciaría si «las encuestas están cayendo en picada, la recaudación de fondos se agota y las entrevistas van mal».
«Él no es ajeno a todo esto», dijo la fuente.
Este es el primer indicio que se hace público de que el Presidente está considerando seriamente si puede recuperarse después de su devastadora actuación en el debate celebrado el jueves en Atlanta.
Aumentan también las preocupaciones sobre su viabilidad como candidato y sobre si podrá permanecer en la Presidencia durante otros cuatro años.
Un importante asesor de Biden, que también habló bajo condición de anonimato para discutir la situación, dijo que el Presidente estaba «muy consciente del desafío político que enfrenta».
Los funcionarios de campaña observaban nerviosamente las encuestas, reconociendo que los malos números podrían agravar la crisis.
Una encuesta de CBS News del miércoles mostró que el ex Presidente Donald Trump superaba a Biden desde el debate con un 50 por ciento frente a un 48 por ciento a nivel nacional y un 51 por ciento frente a un 48 por ciento en los estados en disputa.
Biden está tratando de acercarse lentamente a los funcionarios electos demócratas y tiene una reunión con gobernadores demócratas en la Casa Blanca programada para el miércoles por la noche.
También sigue tratando de comunicarse con personas en las que confía desde hace mucho tiempo y le ha dicho a al menos una persona que está abierto a la posibilidad de que sus planes de dejar atrás su actuación en el debate y volver a centrarse en su rival, Trump, no funcionen.
Varios aliados de Biden, que se ha reunido con la familia y los asesores desde el debate del jueves, han subrayado que el presidente todavía está en la lucha de su vida política y en gran medida ve este momento como una oportunidad para volver de ser descartado, como lo ha hecho muchas veces a lo largo de su carrera de medio siglo.