Desde la madrugada de este viernes, más de 4 mil 500 vuelos han sido cancelados, caminos cerrados, y 1.4 millones de estadounidenses se encuentran actualmente sin luz debido a la gran tormenta invernal que está afectando a una buena parte de Estados Unidos.
Los aeropuertos más afectados son los de Seattle, Nueva York, Detroit, Chicago y Denver, informó Flightaware, sitio especializado en circulación aeropuertaria.
“Más de 240 millones de personas (más de 70 por ciento de la población) están afectadas por alertas meteorológicas», dijo el Servicio Nacional de Meteorología.
Los estadounidenses se enfrentan a temperaturas gélidas, condiciones de ventisca, que afectan con cortes de energía a más de 458 mil hogares y negocios y derivan en reuniones navideñas canceladas.
Esta gran tormenta invernal, “única en una generación“, como la está definiendo estos días el National Weather Service (NWS), comenzó afectando al medio oeste del país pero este viernes se está intensificando y ya se extiende hacia el este, tanto al norte como al sur.
Los problemas en el transporte afectan también a los trenes y a compañías de autobuses como Greyhound, la mayor de ellas, que ya ha advertido que muchas rutas del noreste o del medio oeste pueden cancelarse o sufrir alteraciones.
En su página web, el servicio meteorológico nacional advierte ya desde el inicio sobre lo extraordinario de esta “inmensa” tormenta y anuncia que las fuertes precipitaciones afectarán a buena parte del país, sobre todo el este, durante la jornada.
El presidente de EE.UU., Joe Biden, compareció públicamente el jueves para advertir a los estadounidenses que se tomen la tormenta “de forma extremadamente seria” y que sigan las recomendaciones de las autoridades.