El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su desacuerdo con la reciente orden del gobierno de Estados Unidos de reforzar el muro fronterizo con México, atribuyendo esta medida a «fuertes presiones» ejercidas por grupos de extrema derecha del Partido Republicano.
Durante una conferencia matutina, el mandatario federal destacó que esta acción representa un retroceso en lugar de resolver el problema migratorio y señaló que abordaría este tema en su reunión con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en el marco del Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad México-Estados Unidos.
López Obrador señaló que, hasta ahora, el presidente Biden había sido el único mandatario en no impulsar la construcción de un muro en la frontera y criticó a los legisladores de extrema derecha del Partido Republicano a quienes calificó de «maquiavélicos» debido a sus ambiciones políticas y su falta de consideración.
El presidente mexicano subrayó que esta autorización para la construcción del muro no resuelve los problemas subyacentes y causas de la migración. En lugar de eso, abogó por abordar las causas profundas, como la inversión en programas de bienestar, actividades productivas, la creación de empleos y el apoyo a los jóvenes en los países de América Latina y el Caribe.
