Con un lleno total se estrenó la pieza teatral «Olvidarás el Fuego», basada en la novela homónima de la autora Gabriela Riveros y adaptada por el dramaturgo Hernán Galindo.
El Presidente Municipal de Monterrey, Luis Donaldo Colosio, y el Gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, junto a sus respectivas esposas encabezaron el arranque de la obra en la Gran Sala del Teatro de la ciudad.
Al ser la primera vez que se conmemora el aniversario número 427 de la Fundación de Monterrey con una muestra artística como esta, Colosio destacó que al conocer nuestra historia empatizamos más con las personas en situación de vulnerabilidad, además de que nos ayuda a no repetir los mismos errores, atrocidades, e injusticias del pasado.
“Esta obra es una ventana a un mundo desconocido y ese es el poder del arte, el arte que nos abre panoramas, que nos permite empatizar con otras perspectivas, que nos permite ampliar nuestra manera de pensar, esta es nuestra historia como nuevoleoneses como regiomontanos”, explicó.
“Hoy que conmemoramos nuestra fundación, conmemoramos también toda nuestra historia: la buena, la mala, y la que se buscaba olvidar. Reconozcamos esta historia de supervivencia en cada una y uno de nosotros y recordemos a quienes iniciaron el camino de lo que ahora es nuestro bello estado y nuestra hermosa ciudad”.
“Olvidarás el Fuego», es la primera novela que narra la tragedia de Luis de Carvajal, alias “Joseph Lumbroso”, y de la suerte que corrieron sus manuscritos y memorias hallados en 2016 en una casa de subastas en Nueva York, tras haber sido robados del Archivo General de la Nación.
Con las actuaciones estelares de Isaura Espinosa y Alberto Estrella, durante casi tres horas de duración, la puesta en escena narra la vida de una comunidad cuya cultura, conocimientos y rutas comerciales han sido fundamentales para la conformación del mundo contemporáneo.
Con la muestra, dijo Colosio, el elenco de 32 histriones trasciende las barreras del tiempo, del espacio y del idioma.
Los más de 100 parientes de Luis Carvajal, colonizador del estado de Nuevo León, fueron acusados por la Santa Inquisición de practicar la religión judía, aún y cuando habían sido bautizados como católicos.
El fundador murió en prisión esperando sentencia y su familia directa fue torturada y sometida a la hoguera.