Washington, D.C.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles una proclamación presidencial que reinstaura restricciones migratorias a ciudadanos de 12 países y limita la emisión de visas a otros siete, bajo el argumento de proteger la seguridad nacional y combatir el terrorismo internacional.

La nueva orden ejecutiva marca un regreso a una de las políticas más polémicas de su primer mandato, conocida como el “veto migratorio”, que entonces fue impugnado judicialmente pero respaldado por la Corte Suprema.

La prohibición total de entrada aplica para nacionales de Afganistán, Chad, República del Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Irán, Libia, Myanmar, Somalia, Sudán y Yemen.

Adicionalmente, se imponen restricciones parciales a ciudadanos de Burundi, Cuba, Laos, Sierra Leona, Togo, Turkmenistán y Venezuela, incluyendo la suspensión de diversos tipos de visado no inmigrante como los de turismo, negocios y estudios.

Estados Unidos debe garantizar que los extranjeros admitidos no representen amenazas, ni tengan actitudes hostiles hacia nuestros principios, cultura e instituciones”, señala la proclamación firmada por Trump.

El mandatario también encomendó al secretario de Estado, Marco Rubio, la evaluación de los sistemas de verificación migratoria de los países emisores. Tras ese proceso, se determinó que varias naciones siguen presentando deficiencias serias en sus mecanismos de control, así como resistencia para recibir a sus ciudadanos deportados.

Venezuela y Cuba, en la mira

En el caso específico de Venezuela, la administración Trump argumenta que el país carece de una autoridad central confiable para expedir pasaportes y verificar la identidad de sus ciudadanos, además de negarse históricamente a aceptar repatriaciones. Por ello, se suspende la entrada de venezolanos con visas de turismo, negocios (B1/B2), estudiantes (F, M) y visitantes de intercambio (J).

Para Cuba, catalogado nuevamente como Estado patrocinador del terrorismo, las restricciones obedecen a la falta de cooperación con autoridades estadounidenses y altas tasas de estancias prolongadas de sus nacionales, según informes oficiales. También se suspenden las visas B1, B2, F, M y J.

La orden ejecutiva fue emitida días después de que Trump culpara a las políticas migratorias del expresidente Joe Biden por el reciente atentado en Boulder, Colorado, cuyo sospechoso es de origen egipcio —país que, sin embargo, no aparece en la lista de vetados.

Durante su primer mandato, Trump ya había restringido el ingreso a ciudadanos de países como Irán, Corea del Norte, Siria y Yemen, en una política duramente criticada por grupos de derechos civiles, pero avalada en 2018 por el máximo tribunal del país.

Esta nueva versión del veto migratorio permanecerá vigente hasta que los países señalados demuestren mejoras sustanciales en sus sistemas de control, indica la orden.