Washington, D.C.— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este miércoles la prórroga en la suspensión de aranceles sobre productos de México y Canadá incluidos en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), medida que brinda un alivio temporal a sus principales socios comerciales.

La Casa Blanca confirmó la decisión mediante un comunicado, aunque no precisó la duración de la prórroga ni los motivos específicos detrás de la determinación.

El pasado 4 de marzo, Trump había impuesto aranceles del 25 % a las importaciones provenientes de México y Canadá. Sin embargo, estableció una moratoria de un mes para los productos cubiertos por el T-MEC, que incluyen bienes agrícolas, autopartes y maquinaria, con la posibilidad de que estas tarifas entraran en vigor este miércoles.

De haberse aplicado, estos aranceles habrían representado un golpe al comercio trilateral, poniendo en riesgo la continuidad del tratado. No obstante, el gobierno estadounidense decidió mantener la pausa, sin ofrecer mayores detalles sobre una posible eliminación definitiva de los gravámenes.

Nuevos aranceles globales, México y Canadá quedan fuera

En el mismo anuncio, Trump confirmó la imposición de nuevos aranceles a 184 países, así como a la Unión Europea (UE), la cual enfrentará un gravamen del 20 %. Otras naciones latinoamericanas como Argentina, Brasil y Chile estarán sujetas a un arancel mínimo del 10 %.

México y Canadá no fueron incluidos en esta lista de nuevos impuestos, lo que evita mayores costos para sus exportaciones. No obstante, las importaciones de ambos países seguirán sujetas a un arancel del 25 %, además de un gravamen adicional del 25 % sobre el acero y el aluminio, lo que elevará el costo total de estos materiales al 50 %.

Asimismo, el petróleo y el gas que Canadá exporta a EE.UU. continuarán con un arancel del 10 %.

El futuro del T-MEC, en la balanza

Si bien la decisión de prorrogar la suspensión de aranceles evita un choque comercial inmediato, la falta de certeza sobre la duración de la medida mantiene en vilo a los sectores empresariales y exportadores de la región. Analistas advierten que el futuro del T-MEC sigue en riesgo, mientras el gobierno de Trump ajusta su estrategia comercial de cara a los próximos meses.