En un entorno de creciente tensión legislativa, el Senado de la República ha decidido acelerar la tramitación de la reforma al Poder Judicial propuesta por el Presidente Andrés Manuel López Obrador. Este acuerdo, aprobado en sesión reciente, establece un procedimiento de “fast track” para la revisión y aprobación del proyecto una vez que sea recibido de la Cámara de Diputados.
El pleno del Senado acordó que, tan pronto como la Cámara Baja remita la minuta del proyecto, esta será inmediatamente turnada a las comisiones competentes. En estas comisiones, se dará celeridad al análisis y dictaminación del proyecto para su eventual aprobación por el Senado. Este procedimiento permitirá que el proyecto continúe su curso legislativo sin esperar una sesión plenaria formal, acelerando así su proceso de revisión.
Además, el Senado ha adoptado una medida preventiva ante posibles bloqueos similares a los ocurridos en la Cámara de Diputados. Se ha aprobado la posibilidad de sesionar en una sede alterna en caso de que factores de “fuerza mayor” impidan el desarrollo de la discusión y votación en el recinto oficial del Senado. Esta decisión responde a los recientes incidentes en San Lázaro, donde la sesión tuvo que trasladarse a la Sala de Armas de la Ciudad Deportiva de la Magdalena Mixiuhca debido a protestas.
Por su parte, la Cámara de Diputados comenzó la discusión de la reforma en la Sala de Armas de la Magdalena Mixiuhca a las 16:00 horas del 3 de septiembre de 2024. Según el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Ricardo Monreal, se prevé que tanto la discusión general como la votación en lo general y en lo particular se realicen en una sola sesión. Este enfoque podría permitir que el proceso de votación finalice en las primeras horas del 4 de septiembre.
La reforma propuesta, que ha suscitado una amplia gama de reacciones y protestas, busca introducir cambios significativos en el Poder Judicial.