La muerte del papa Francisco, ocurrida este lunes a los 88 años, marca no solo el fin de un pontificado caracterizado por la cercanía pastoral y las reformas internas, sino también el inicio de una nueva etapa de profundas implicaciones para la Iglesia católica. Con la mirada del mundo puesta en Roma, se aproxima un nuevo cónclave que definirá el rumbo del catolicismo en las próximas décadas.

Sin embargo, predecir quién ocupará el trono de San Pedro es una tarea arriesgada. Un viejo refrán italiano lo advierte con ironía y sabiduría: “Quien entra al cónclave como Papa, sale como cardenal”. La historia del Vaticano ha demostrado que los favoritos suelen quedar en el camino, mientras que los inesperados se alzan con el solideo blanco.

¿Quiénes son los papables?

El término “papabile”, que en italiano significa “papable”, se utiliza para describir a aquellos cardenales que, por su trayectoria, liderazgo y perfil ideológico, podrían ser considerados por el Colegio Cardenalicio como dignos sucesores de Francisco. En esta ocasión, el campo está más abierto que nunca gracias a las reformas impulsadas por el pontífice argentino, que amplió la diversidad geográfica y cultural del cuerpo electoral.

Entre los nombres que ya circulan en los pasillos del Vaticano y en medios internacionales figuran figuras de distintas regiones del mundo: desde Europa hasta África, América y Asia. Cardenales con experiencia pastoral y diplomática, otros con peso teológico o una visión reformadora afín al estilo de Francisco.

El cónclave —que se desarrollará a puerta cerrada en la Capilla Sixtina— reunirá a 137 cardenales menores de 80 años con derecho a voto. La elección requerirá una mayoría calificada de dos tercios y podría extenderse por días, en un proceso que combina oración, deliberación, tradición y política interna de la Iglesia.

Un cónclave que marcará época

Este nuevo cónclave no solo será observado por católicos de todo el mundo, sino también por analistas, líderes y fieles atentos al perfil del futuro Papa. ¿Será un continuador del legado de Francisco o marcará un giro en la dirección doctrinal y pastoral? ¿Surgirá un pontífice de América Latina, Asia o África? ¿Habrá una sorpresa que rompa con las predicciones?

Lo cierto es que, como ha ocurrido en más de una ocasión, el Espíritu Santo, según la tradición eclesiástica, puede guiar la decisión hacia lo inesperado.

Mientras tanto, el mundo aguarda.

¿Quién será el próximo Papa? Conoce a los papables del Vaticano