Japón.- El sueño de muchas mujeres es casarse con un príncipe y ser parte de la realeza, pero la princesa Ayako de Japón hizo todo lo contrario, renunció a su título para casarse con su novio y así convertirse en una plebeya.
La sobrina del emperador Akihito contrajo nupcias este lunes con su novio Kei Moriya, un empleado de una compañía de transporte marítimo, en una ceremonia privada.
Con esto Ayako pasó de princesa a plebeya, debido a que desde el año 1947 la Casa Imperial estableció que las mujeres nacidas como princesas pierden su estatus de alteza y las funciones de representación al casarse con un hombre que no tenga sangre de la realeza.
La princesa de 28 años, llegó al santuario Meiji de la capital japonesa vestida con un atuendo tradicional de la corte imperial del país, donde ya la esperaba su prometido.
Al salir de la ceremonia su ahora esposo Moriya expresó a los medios de comunicación que espera poder ayudar a su esposa adaptarse a la vida de una plebeya.
«Quiero que trabajemos juntos, tomados de la mano, para crear una familia llena de sonrisas», aseguró.
Pero Ayako no perdió todos sus privilegios, pues el Gobierno japonés informó que recibirá una cantidad de 107 millones de yenes para que pueda seguir llevando el mismo estilo de vida a la que está acostumbrada.
Los recién casados se conocieron gracias a la amistad entre sus madres y que se enamoraron a primera vista.