Monterrey, NL.- A tres años del hallazgo del cuerpo de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa, sus padres, Mario Escobar y Dolores Bazaldúa, reiteraron su exigencia de justicia y advirtieron que están dispuestos a acudir a organismos internacionales si en México no se garantiza el esclarecimiento del caso.
Durante una misa celebrada este lunes por la noche para conmemorar el tercer aniversario del hallazgo del cuerpo de la joven estudiante de Derecho —ocurrido el 21 de abril de 2022 en una cisterna del Motel Nueva Castilla, en el municipio de General Escobedo—, los padres de Debanhi expresaron su frustración ante la falta de avances sustanciales en la investigación.
“Si no hay avances, nos vamos a ir a instancias internacionales”, declaró Mario Escobar. “Se nos han acercado muchas fuentes, entonces no descartamos nada”.
El padre reveló que organizaciones como la ONU Mujeres y organismos interamericanos han mostrado disposición para apoyar el caso.
La investigación, que en un inicio estuvo a cargo de las autoridades locales en Nuevo León, fue posteriormente atraída por la Fiscalía General de la República (FGR), sin embargo, los avances han sido mínimos, de acuerdo con la familia.
“Traemos mucho coraje, mucha frustración porque no ha habido avances. Estoy a punto de decir muchas cosas, pero tengo que esperar. Le sigo dando la oportunidad a las autoridades”, sostuvo Escobar.
La madre de Debanhi, Dolores Bazaldúa, compartió que han solicitado una audiencia con la presidenta Claudia Sheinbaum para exponer personalmente su caso.
“Esperamos pronto charlar con la presidenta, Claudia Sheinbaum, de mujer a mujer con mi esposa. Que sienta lo que siente una madre, porque así como nosotros hay mucha gente con desaparecidos”, expresó Mario Escobar.
Además, anunciaron el próximo estreno de un documental titulado tentativamente “Debanhi. ¿Quiénes mataron a nuestra hija?”, en el que participó la familia y que, aseguran, revelará información inédita sobre el caso.
La desaparición y feminicidio de Debanhi Escobar en abril de 2022 generó una oleada de indignación nacional e internacional, convirtiéndose en un símbolo del clamor social por justicia y por un alto a la violencia contra las mujeres en México.