Monterrey, NL
Ante el impacto de un 30 por ciento en las tarifas de insumos energéticos los empresarios de Nuevo León, a través de la CAINTRA, solicitarán al Presidente electo una mayor inversión en infraestructura de gasoductos, que permita llevar la molécula a todo el país y adquirirla a precios competitivos.
Además de incrementar la producción nacional y ser lo suficientemente basta para satisfacer la demanda de la industria y el comercio, por lo que es necesario incrementar la inversión en estos rubros.
Mediante un comunicado emitido por la Cámara de la Industria de la Transformación de Nuevo León, se explica que dicho impacto representa un obstáculo para su desempeño, además de ser superior a los que señalan a la inseguridad o la volatilidad del tiempo de cambio como un factor negativo.
El incremento en los precios de las gasolinas, electricidad y gas natural se refleja ya en los precios finales de los productos, representando un incremento del 20 por ciento en la inflación del mes de septiembre, que supera el 5 por ciento, señala el comunicado.
«En el caso particular del gas, hemos señalado que los industriales enfrentamos precios que
duplican a lo cotizado a nivel internacional, consecuencia de una escasez de la molécula,
principalmente en el centro y sur del país.
«Debido a esto, se han vuelto a presentar problemas de suministro, donde Pemex confirma volúmenes de gas natural por debajo de las cantidades pactadas en el contrato, limitando el consumo del energético o incrementando aún más los costos ante las penalizaciones por consumir gas por encima del volumen confirmado por Pemex», argumentan los industriales.
Un ejemplo de ello es el incremento de hasta el 62.6 por ciento en el costo del millón de BTU en la cuenca del Atlántico, donde el precio es de 7.73 USD/MBTU, pero a los industriales se le vende en 12.56 USD/MBTU.
«Si a esto se suma que la producción industrial requiere el uso del gas por encima de los bajos niveles confirmados por Pemex, se obliga a las empresas a pagar el excedente a lo confirmado a precio de gas licuado más un 50% del valor de ese gas licuado como penalización por consumir arriba de los volúmenes confirmados».
El comunicado informa que ante la situación se han sostenido reuniones con las autoridades energéticas, en donde se coincidieron en que el origen de la problemática es:
• La caída en la producción nacional de gas, la cual ha sido un 33% menos en los
últimos 3 años. Lo anterior ha derivado en la necesidad de importar un mayor
volumen de gas natural licuado a un sobrecosto y con implicaciones logísticas que
lo hacen más caro.
• La falta de infraestructura en el sistema nacional de gasoductos, que provoca una
saturación en los puntos de inyección en la frontera y falta de conexión con el centro
del país.
• Un único oferente de molécula en el centro y sur del país, que es PEMEX.
Como acciones para aminorar el impacto en la industria, las autoridades se han comprometido a realizar acciones para resolver esta situación. Entre ellas destaca la terminación del gasoducto marino de la CFE hacia Altamira y Tuxpan; así como la terminación de una nueva estación de compresión en Cempoala a finales del primer trimestre del 2019.
«Con estas obras, se logrará un mayor abasto para las regiones del centro y sur del país. Adicionalmente, y para aminorar los efectos en el corto plazo, PEMEX se encargará de importar el gas licuado para la región, con lo cual esperamos una reducción en los costos al ya no acudir al mercado con compras de emergencia, sino planificadas» dice el comunicado.
«La seguridad energética debe ser prioridad para el país, la industria, como uno de los
motores del desarrollo social y económico de México, no puede detenerse ante la falta de
insumos estratégicos» puntualiza el comunicado.
