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Información: Publimetro.com.mx
En las primeras horas del 20 de septiembre de 2017, un día después del sismo de 7.1 que sacudió a la Ciudad de México, todo el país puso sus ojos sobre el Colegio Enrique Rébsamen tras la noticia de que bajo los escombros aún había una niña con vida.
Desde el colapso de uno de los edificios de la escuela fueron rescatados 11 pequeños con vida, y mientras continuaban las labores para terminar de sacar los cuerpos de 26 personas más, 19 niños y siete adultos, trascendió la existencia de otra sobreviviente: Frida Sofía.
Todos los mexicanos estuvieron pendientes de Frida a través de televisoras y otros medios que cubrieron con esmero el rescate con la esperanza de verla salir con vida, labores que se extendieron hasta la mañana del 21 de septiembre cuando se confirmó que la menor nunca había existido.
Fue el subsecretario de Marina, Ángel Enrique Sarmiento Beltrán, quien descartó la existencia de la niña, esto tras la avalancha de dudas que surgieron cuando no se encontraron registros, ni la presencia de familiares esperando noticias de ella
Pero entonces ¿Cómo se fabricó esta mentira?
Televisa y Danielle Dithurbide fueron los más castigados por la opinión pública al ser acusados de orquestar toda una farsa con la presunta intención de lucrar con la desgracia; sin embargo, la información que difundió Danielle fue la misma que dieron a conocer todos los reporteros que se encontraban dentro del colegio.
Declaraciones de Dithurbide, así como la de otros periodistas que estuvieron presentes, indicaban que la información que ellos replicaron para sus respectivos medios vino en todo momento de rescatistas, pero también de fuentes oficiales, pues cabe recordar que siempre había un representante de las secretarías de la Defensa Nacional o de la Marina.
UN TELÉFONO DESCOMPUESTO
Fue el almirante José Luis Vergara quien en cadena nacional para las cámaras del Televisa confirmó que había una sobreviviente y que incluso se había logrado hacer contacto con ella.
El entonces secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, también tuvo presencia el 20 de septiembre en la escuela colapsada y ahí declaró, tras hablar con elementos castrenses y rescatistas, que Frida Sofía seguía bajo los escombros.
Durante ese día la información que salía del preciso lugar en el que los rescatistas trataban de abrirse espacio para rescatar a Frida, era que la habían escuchado hablar, que se tenía la certeza de que estaba resguardada bajo un escritorio y que incluso había bebido agua de una manguera.
