El gobierno francés solo permitirá el ingreso de viajeros de la Unión Europea a partir del domingo, con la intención de detener la propagación de nuevas cepas del coronavirus, anunció el Primer Ministro Jean Castex.

Sin embargo, aún cuando los viajeros lleguen de países del bloque, deberán presentar resultado negativo a la prueba de COVID-19.

Castex informó que se decreta toque de queda de 12 horas diarias, cierre de centros comerciales los domingos, mayores controles para realización de fiestas secretas o reapertura de restaurantes; así como limitación de los viajes hacia y desde sus territorios de ultramar.

Los contagios, las hospitalizaciones y las muertes por el virus han aumentado de forma constante pero no brusca en las últimas semanas. Muchos médicos han instado a un nuevo cierre nacional como los impuestos en varios otros países europeos.

Actualmente, más del 60 por ciento de las camas de terapia intensiva están ocupadas por pacientes con coronavirus. Francia ha registrado 75 mil 620 muertes, la séptima cifra nacional más alta del mundo.