La Secretaría de Seguridad y el Poder Judicial del Estado de México liberó a 59 internos de sus centros penitenciarios, debido a su vulnerabilidad de contraer COVID-19.
Las autoridades explicaron que se trata de internos sentenciados por delitos no graves ni violentos y que están en riesgo de contraer este virus ya sea porque son mujeres embarazadas, con hijos o son personas de edad avanzada y pacientes psiquiátricos.
Anunciaron que en este momento se analizan 248 expedientes más de preliberación, además de que también se colocaron mil 835 brazaletes de monitoreo electrónico para que ciertos internos puedan cumplir su condena en reclusión domiciliaria.
Hasta este viernes, cuatro internos y un custodio del Penal de Cuautitlán dieron positivo por Coronavirus, mientras que 19 más se encuentran bajo sospecha. Las autoridades mexiquenses refirieron que todos los casos evolucionan favorablemente.
En total, se trata de la investigación de más de cinco mil 500 casos, todos ellos atendiendo a los parámetros que se han establecido en el marco de la legalidad, que por su condición son considerados no graves ni violentos.