«Tenemos una estrecha colaboración con la nueva presidenta de México. Esperamos trabajar con ella y su Gobierno. El embajador espera trabajar con ella y su Gobierno, y esperamos mantener nuestra asociación», dijo el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en una rueda de prensa.
Miller respondió así al ser cuestionado por la decisión de Sheinbaum de establecer nuevas directrices para que el embajador Salazar aborde todos los asuntos a través de la Cancillería mexicana, en lugar de hablar directamente con los diferentes miembros del Gabinete.
En una reunión con el nuevo canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, se comunicó a Salazar que ya no podrá llamar a los miembros del Ejecutivo, sino que tendrá que abordar todos los asuntos con la Cancillería.