El inminente aumento en las tarifas del transporte público en Nuevo León ha desatado un debate entre la urgencia de actualizar los precios para frenar el deterioro del servicio y el rechazo ciudadano ante el impacto económico que esto representará.

La Comisión de Tarifas del Instituto de Movilidad y Accesibilidad (IMA) propuso tres escenarios para el incremento en las tarifas del transporte público, dejando en manos del Consejo Consultivo y la Junta de Gobierno la decisión final.

Durante una sesión celebrada en el Parque Fundidora, marcada por protestas de ciudadanos y colectivos como Únete Pueblo, se presentaron las siguientes opciones:

1. Incrementar las tarifas a $17 con pago electrónico y $20 en efectivo.
2. Subirlas a $24.50 y $25, respectivamente, lo que el IMA considera la tarifa operativa “real” tras 11 años sin ajustes.
3. Mantener las tarifas actuales, con el riesgo de un deterioro mayor en el servicio.

La propuesta más accesible (17 y 20 pesos) ha sido señalada por las autoridades como insuficiente para enfrentar las necesidades de modernización. Por otro lado, el alza más alta, de hasta 25 pesos, ha generado enojo entre los usuarios, quienes critican que no se garantice una mejora inmediata en el servicio.

El sistema de transporte público de Nuevo León arrastra problemas graves: unidades obsoletas, largos tiempos de espera y rutas insuficientes para la creciente demanda. Según Rita Bustamante, titular del Comité Técnico del IMA, sin un aumento tarifario, el deterioro será insostenible.

Estamos trabajando para garantizar que, si se aprueba el aumento, este entre en vigor a inicios de 2025. Sin recursos, las condiciones del servicio seguirán empeorando”.

Un grupo de manifestantes de la ONG «Únete Pueblo», se congregaron para exigir la cancelación de los aumentos. Gritando consignas como “No al tarifazo” y “Samuel, no nos traiciones”, expresaron su descontento ante el deterioro del servicio y la falta de mejoras visibles.

Los inconformes señalaron que el incremento es injustificado y destacaron las condiciones deficientes del transporte público.

El alza no tiene sentido si la calidad del servicio sigue siendo tan mala”, argumentó un representante del colectivo Únete Pueblo.

Con un posible costo de hasta $25 pesos en efectivo, los usuarios regulares, que realizan dos o más viajes diarios, podrían gastar más de $1,000 pesos al mes en transporte. 

Aunque la sesión de la Comisión de Tarifas fue de carácter técnico, la resolución final quedará en manos de la Junta de Gobierno del IMA, integrada mayoritariamente por funcionarios públicos, empresarios y alcaldes de la Zona Metropolitana de Monterrey. Aunque se contempla participación ciudadana a través del Consejo Consultivo, este organismo solo puede emitir recomendaciones.

La votación definitiva está programada para el próximo viernes 27 de diciembre.