La comunidad médica y autoridades sanitarias de Colorado han confirmado un nuevo caso de peste bubónica en el condado Pueblo, marcando el tercer incidente de esta enfermedad en territorio estadounidense durante el presente año.

La infección, atribuida a la bacteria Yersinia pestis, fue diagnosticada en un residente local cuyas circunstancias de contagio aún no han sido determinadas.

De acuerdo al Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente del Condado Pueblo (PDPHE), el paciente fue hospitalizado la semana pasada y su condición ha mostrado mejoría desde entonces, según informó Trysten García, portavoz del departamento.

La peste bubónica, conocida coloquialmente como la plaga, es endémica en varias regiones del oeste de Estados Unidos, incluyendo áreas de Colorado, Arizona, California, Nevada, Nuevo México y Oregón. La transmisión más común ocurre cuando pulgas infectadas saltan de roedores a humanos, aunque también puede propagarse por contacto directo con animales infectados o a través de la tos de estos.

El PDPHE ha recomendado medidas precautorias a los residentes, incluyendo evitar que las mascotas cazen roedores o circulen por colonias de perritos de las praderas, así como advertir sobre la efectividad limitada de los collares antipulgas contra pulgas portadoras de la peste.

Alicia Solís, directiva del PDPHE, enfatizó la importancia del tratamiento temprano con antibióticos para mitigar el riesgo de complicaciones graves o fatalidades asociadas con la enfermedad, para la cual no existe vacuna disponible.

La peste bubónica, infame por sus brotes históricos devastadores como la Muerte Negra en Europa en el siglo XIV, continúa siendo una preocupación global. A nivel mundial, países como la República Democrática del Congo, Madagascar y Perú reportan la mayor incidencia de esta enfermedad, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).