Por Alma De la Rosa Flores
El secretario de Salud de Nuevo León, Manuel de la O. Cavazos, confirmó que se registró un brote de COVID-19 en el Centro de Reinserción Femenil en el que 30 Personas Privadas de la Libertad resultaron contagiadas y 13 son casos sospechosos.
El pasado viernes la Comisión Estatal de Derechos Humanos emitió una serie de medidas precautorias para evitar que se produzcan daños o afectaciones en las reclusas, por lo que la Agencia de Administración Penitenciaria informó que la mayoría de las contagiadas han evolucionado satisfactoriamente y solo una fue enviada a un hospital.
“Tenemos 30 pacientes confirmados y 13 sospechosos PPL (Personas Privadas de la Libertad), siempre estoy en comunicación con el licenciado Eduardo Guerrero, que es el encargado de los centros penitenciarios, los CERESOS del Estado, agradezco enormemente su ayuda”, dijo.
“Porque siempre está al pendiente de la salud de todos los PPL, todos los días me da el reporte y nosotros colaboramos con él y toda su gente para tratar de cuidarlos. Es importante cuidarlas y cuidarlos a todos porque tienen un derecho bien establecido que es el derecho a la salud”, agregó.
Este fin de semana trascendió que las mujeres contagiadas sería trasladadas para evitar un contagio mayor; sin embargo, De la O no confirmó la situación, por lo que no dio a conocer a dónde podrían ser enviadas las reclusas.
Por otra parte, el titular de la Secretaría de Salud dijo que el Estado cuenta con lugares propios para recibir a persona contagiadas del SARS COV-2 que no cuentan con un sitio para llevar a cabo su aislamiento, entre ellos la Universidad de Ciencias de la Seguridad.
En tanto, el organismo de Derechos Humanos recomendó medidas precautorias como la atención médica oportuna, valorar el traslado a un hospital, brigadas médicas a la Secretaría de Salud, realizar un diagnóstico y pruebas médicas a las mujeres contagiadas para descartar la propagación del contagio, y contar con espacios y camas suficientes, entre otras.