Por carecer de concesión tres pozos profundos fueron clausurados por el Gobierno del Estado en el rastro municipal de Monterrey.
En una inspección encabezada por el Gobernador Samuel García Sepúlveda, se detectaron los pozos cuya agua era utilizada para la limpieza de las reses.
De acuerdo a la información difundida en las redes del Ejecutivo, por cada res se utilizan mil litros para su limpieza. En el lugar se sacrifican alrededor de 600 animales por día.
«No tienen ni idea del negociazo, la corrupción y la cantidad de agua que nos robaron por décadas en estos rastros.
«La cantidad de agua gigante, bestial, que consume con pozos ilegales para darle de tomar a miles de reses, y luego cuando las matan limpiar el sangrerío, el cochinerío, el canal, el rastro… y todos los días sacando agua, litros y litros, que en lugar de llegar a tu casa se usan para el bolsillo, para el negocio de una empresa».
El lugar es operado por una empresa particular desde hace 20 años.
