«Una de esas urgencias es concluir la implementación de la Reforma Laboral; para ello, es necesaria la aprobación del proyecto de ley que crea el Centro de Conciliación Local en el Estado de Nuevo León, que se encuentra en manos del Congreso del Estado», precisa el organismo empresarial en un comunicado
Explica que la Constitución Política de Nuevo León estipula que es facultad de los sectores productivos proponer la terna al gobernador del estado, para que de ella se designe al director general del Centro de Conciliación Laboral.
«Por lo que la Constitución no requiere de modificación alguna ni que, mucho menos, el Congreso del Estado politice un proceso que deriva del consenso de los sectores, así como de compromisos internacionales que se deben cumplir».
Ante la situación, COPARMEX hace un llamado a los diputados para aprobar, sin dilación, el proyecto aprobado por los actores del sector productivo.
«Lo que menos necesitamos es que nuestros gobernantes se distraigan o enfoquen en luchas de poder político, poniendo en pausa los intereses de los neoleoneses que los elegimos.
«Este es un ejemplo de temas de enorme trascendencia para el estado que ya cuentan con el acuerdo de los sectores productivos involucrados y que corren el riesgo de ser politizados por el ambiente de confrontación que se ha generado», precisa el comunicado.
A la vez, señala que los sucesos presentados, como buscar la autonomía de la UIFE y controlar el SAT estatal «invaden atribuciones del Ejecutivo estatal claramente definidas en nuestra Constitución».
«De igual forma, preocupa que desde el Poder Ejecutivo se aliente a que alcaldes y legisladores enfoquen sus energías y tiempo a definir su afiliación política, cuando fueron elegidos para trabajar por sus representados, creando un ambiente de inestabilidad en la integración del Congreso.
«Nuevo León aún tiene grandes áreas de oportunidad: vivimos una sequía histórica; nos encontramos en una fuerte crisis de inseguridad; estamos lejos de contar con un sistema estatal anticorrupción funcional y efectivo; y seguimos tratando de recuperarnos de las consecuencias económicas que dejaron 2 años de pandemia.
Los empresarios llaman al trabajo conjunto para tender los graves problemas que afectan al Estado, e invitan a los representantes de los poderes Ejecutivo y Legislativo a «cumplir» las promesas hechas cuando asumieron el cargo, a privilegiar el diálogo para lograr consensos que abonen a la gobernabilidad del estado y su prosperidad.