«Acordamos que la delegación ucraniana se reuniría con la delegación rusa sin condiciones previas en la frontera entre Ucrania y Bielorrusia, cerca del río Pripyat», anunció Volodimyr Zelensky en su canal oficial de Telegram, al describir una llamada telefónica que sostuvo hoy con el Presidente bielorruso Alexander Lukashenko.
«(Lukashenko) ha asumido la responsabilidad de garantizar que todos los aviones, helicópteros y misiles estacionados en territorio bielorruso permanezcan en tierra durante el viaje, las conversaciones y el regreso de la delegación ucraniana», agregó Zelensky.
Aun no se precisa quiénes asistirán a la reunión que se convoca luego de la conversación telefónica entre Zalensky y Lukashenko, el aliado internacional más cercano de Putin.
La delegación rusa, encabezada por el ex ministro de cultura Vladimir Medinsky, ya se encuentra en Bielorrusia.
Poco antes del anuncio del Mandatario ucraniano, Putin lanzó una nueva amenaza al pedir en televisión estatal a su Ministro de Defensa y a su principal comandante que pusieran en alerta a las fuerzas nucleares de Rusia, lo que dijo’ era una respuesta a las acciones «agresivas» de Occidente, que ayer sacó del sistema financiero SWIFT varios bancos rusos.
Los países occidentales no sólo están implementando «sanciones ilegítimas» contra Rusia, dijo Putin, «sino que altos funcionarios de los principales países de la OTAN se permiten hacer declaraciones agresivas dirigidas a nuestro país».
La noticia diplomática llegó un día en que las tropas rusas, al menos por un tiempo, se acercaron al centro de Járkov, la segunda ciudad más grande de Ucrania. Imágenes verificadas mostraban a ucranianos disparando cohetes contra tropas rusas, así como algunos vehículos militares rusos en llamas.
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