Por: Jorge Maldonado Díaz
Monterrey, NL.- Luego de la manifestación realizada por miles de mujeres, las huellas que dejaron a su paso en la estructura urbana comenzaron a ser borrada este lunes.
Con thinner y lijas, personal de gobierno del estado se dieron a la tarea de realizar las labores de mantenimiento y reparación de los daños.
Al menos 6 personas utilizando este tipo de solventes, desde temprana hora comentaron a remover la pintura de los pisos y paredes para restaurar lo que fue vandalizado.
En tanto que una parte de las bardas, sobre todo en los túneles que bajan, uno por la calle Doctor Coss hacia el palacio de Gobierno y el otro sobre la avenida Zaragoza con rumbo al Palacio Municipal de Monterrey, tuvieron que ser lijados para poder borrar las huellas del grafiteo.
Empleados municipales y estatales estuvieron trabajando a marchas forzadas para dejar listos los trabajos el día de hoy.
La Fuente de la Vida, en la Macroplaza, tuvo que ser desfogada para vaciar el agua teñida de rojo durante la manifestación.
Pegotes alusivos a la violencia de género que también sobresalía en la vía pública también fue retirado.
En un recorrido por las calles del centro de Monterrey, se observó al sacristán de la Catedral Metropolitana de Monterrey pintando las paredes.
Ya que estas estaban pintadas de morado, luego del pase de la marcha de las mujeres por este lugar.
El sacristán, quien es el intendente de la iglesia estaba acompañado por el Arzobispo Rogelio Cabrera.
De acuerdo con las autoridades, la asistencia oficial que se ha señalado es que fue de algunas 15 mil mujeres, aunque solo algunas de ellas fueron las que realizaron pintas en la cantera de la explanada, en algunas paredes y en el piso.
