El número de muertes en China por el coronavirus aumentó a 259, al confirmar las autoridades de la provincia Hubei -la más afectada- 46 víctimas fatales en las últimas 24 horas.
«Estoy lleno de culpa y remordimiento (…) Si hubiera tomado antes medidas restrictivas, el resultado habría sido mejor de lo que es hoy», dijo Ma Guoqiang, secretario del Partido Comunista Chino (PCC) en el municipio, en una inusual admisión de responsabilidad de un político chino.
El embajador chino ante la ONU en Ginebra, Xu Chen, aseguró sin embargo que «no hay que entrar en pánico innecesariamente, ni tomar medidas excesivas», y señaló que la Organización Mundial de la Salud (OMS) «confía plenamente en China».
Tras una reunión en Ginebra, el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, declaró el jueves la epidemia «emergencia de salud pública de alcance internacional», después de que el organismo fuera fuertemente criticado por no haber alertado antes de la gravedad de la situación.