En una maratónica sesión que se extendió por 18 horas, la Cámara de Diputados aprobó este miércoles 4 de septiembre la Reforma al Poder Judicial de la Federación en lo particular. Tras esta votación, el dictamen pasará al Senado para su discusión, marcando un avance significativo en una de las reformas más controversiales del sexenio.
La sesión, celebrada en la Sala de Armas de la Magdalena Mixhuca debido a las protestas de trabajadores del Poder Judicial en San Lázaro, estuvo marcada por intensos debates y posturas encontradas. A pesar de los esfuerzos de la oposición, encabezada por el PAN, PRI y Movimiento Ciudadano (MC), por modificar el dictamen, la mayoría oficialista, compuesta por Morena y sus aliados del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y del Trabajo (PT), desechó la mayoría de las reservas presentadas.
A primeras horas del miércoles, la reforma fue aprobada en lo general con 359 votos a favor y 137 en contra. Más tarde, cerca de las 10:00 horas, se realizó la votación en lo particular, en la que 357 diputados respaldaron el dictamen, 130 votaron en contra y no se registraron abstenciones.
Con la aprobación en la Cámara Baja, el dictamen ahora se trasladará al Senado de la República, donde se anticipa otro intenso debate. A diferencia de la Cámara de Diputados, en el Senado Morena y sus aliados no cuentan con la mayoría calificada necesaria para garantizar su aprobación sin el apoyo de legisladores de la oposición. Sin embargo, hay rumores de que algunos senadores de la oposición podrían respaldar la iniciativa para que avance rápidamente.
El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró la aprobación de la reforma en su conferencia matutina, calificándola como «una muy buena noticia». Mario Delgado, dirigente nacional de Morena, también expresó su satisfacción en redes sociales, destacando que el avance de la reforma es un paso hacia la realización de los anhelos de justicia del pueblo de México.
El siguiente paso para la reforma será su análisis en comisiones del Senado, donde se determinará si avanza al Pleno. Si es aprobada, como se espera, la reforma deberá ser ratificada por dos tercios de los congresos estatales antes de ser promulgada y publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF).